La alcachofa es una planta que contiene propiedades medicinales y aporta múltiples beneficios para la salud y belleza. El secreto de su virtud se encuentra en la cinarina, una sustancia aromática que le da un mejor sabor y muchos otros de sus beneficios y propiedades beneficiosas y terapéuticas.
La alcachofa es rica en potasio y sales de hierro y además es:
Diurética: actúa sobre la retención de líquido, estimulando la función renal es decir, aumenta el volumen de la orina y elimina líquidos.
Depurativa: actúa a nivel intestinal como un suave laxante eliminando las toxinas y sustancias de desecho.
Mejora el metabolismo digestivo.
Tiene un efecto hepatoprotector, por tener una acción colagóga y colerética.
Estimula la actividad de la vesícula biliar, ayudando a la emulsión de las grasas.
Actúa sobre el colesterol malo y los triglicéridos, reduciéndolos.
Las hojas son la parte de la alcachofa más rica en principios activos y, por tanto, la más activa terapéuticamente hablando. Contiene magnesio, potasio y esteroles, los cuales actúan en cierta sinergia con la cinarina, que actúa directamente sobre la regeneración y el buen funcionamiento hepático.
Los activos contenidos en las hojas de la alcachofa, además de ayudar a bajar de peso, tienen un efecto positivo sobre el hígado, sobre el proceso digestivo o contra el exceso de colesterol.